Instrumentos de defensa

Anitoxidantes naturales para la protección de las especies vegetales

Entre las numerosas propiedades que los taninos tienen en la fisiología de los organismos vegetales que los sintetizan, una de las principales es seguramente su capacidad de proteger a la planta de estress biótico y abiótico. La importancia de la presencia de los taninos en los tejidos vegetales está en el hecho de que estos compuestos son eficaces como repelentes de predadores y parásitos.

Los taninos son antibióticos potentes que pueden defender a los tejidos vegetales de la putrefacción de origen fúngica gracias a su actividad inhibitoria de las enzimas hidroliticas (celulasa, pectinasa, xilanasa) utilizados por los patógenos para penetrar en las células vegetales; a su acción sobre las membranas celulares del patógeno (inhibición de la fosforilación oxidativa) y por último gracias a su actividad antioxidante, debida a su capacidad de actuar tanto de sustrato oxidable como de scavenger de radicales libres, para proteger de la oxidación otros constituyentes celulares.

La toxicidad de los taninos en relación a muchos patógenos fúngicos está bien documentada y, en general, pruebas in vitro no han evidenciado sustanciales diferencias entre la toxicidad de los taninos hidrolizables y la de los condensados.

Los taninos, y en particular los elagitaninos, son inhibidores endógenos del crecimiento de numerosas especies de insectos infecciosos, actuando como sustancia antibiótica o como disuasor antinutricional en relación a insectos y áfidos.

Esta función está correlacionada con la toxicidad que estos pueden tener gracias a su capacidad de acomplejar proteínas y disminuir la capacidad de que los alimentos sean digeridos, con efectos negativos sobre el metabolismo endógeno del insecto, mientras otro aspecto de su poder disuasorio se relaciona con su efecto en el sabor (astringencia) y la dureza de los tejidos.

Así ocurre, por ejemplo, con el ácido elágico que inhibe fuertemente el crecimiento de un fitófago del tabaco, el Heliothis virescens o con los elagitaninos que se han mostrado eficaces para combatir la infección de distintas especies de insectos, como Schizaphis graminum y Myzus persicae, mientras los taninos condensados son eficaces contra el Gossypium hirsutum.